Y las formas murieron como siempre,
tras el paso de moda.
Un mar de letras discriminadas
y de palabras proscritas
celebraron su muerte.
Salieron de su cautiverio literario
para andar por las calles
embriagando canciones
y mensajes sin verso
que declaran amores
y dibujan la vida
Su tristeza
Su alegría.
Las rancias formas de abolengo literario
quedaron en espera
tras la turba inmoral que las margina.
El abecedario recuperó la vida.
1 comentario:
En cualquier voz callejera, si te detienes y escuchas sin prejuicios encontraremos la poesia cotidiana.
un abrazo sincero por tus versos.
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